Pat Symonds, jefe de ingeniería del equipo francés, confía totalmente en las opciones del asturiano y tras anunciar el objetivo para 2008 lo explica: "Estamos como locos por darle el coche que su talento merece"
Rafa Payá | 08/02/2008
Toda una vida dedicada a una empresa te faculta para que tu opinión sea tomada muy en cuenta. Ése es el caso de Pat Symonds. El actual jefe de ingeniería de la escudería Renault lleva enrolado desde el comienzo de la década de los ochenta (primero fue Toleman y después Benetton hasta su denominación actual). Tan sólo Rory Byrne le convenció en 1991 para marcharse durante una temporada al proyecto frustrado de Reynard, pero regresó pronto a su casa. Cuando llegó tenía menos de 30 años y ahora tiene 54.
Por eso nadie mejor conoce el equipo galo. Fernando Alonso tuvo una relación difícil con él en su primera época pero el asturiano sabe que sus resultados dependen en buena medida del técnico británico. Symonds no es amigo de ensalzar gratuitamente a sus pilotos, ni siquiera lo hacía cuando el asturiano logró sus dos Mundiales ni diez años antes en la misma situación con Michael Schumacher.
Por eso sus palabras en 'Autosport' deben ser tomadas como un indicativo de que las cosas van por buen camino en Renault: "Estoy seguro de que la combinación de Alonso con un revitalizado Renault le dará la opción de luchar por las victorias. Él sabe lo que quiere del coche y nosotros ya hemos demostrado en el pasado que sabemos proporcionárselo".
Eso sí, el ingeniero apostilla que la mejora que esperan para 2008 es un cúmulo de factores y no sólo el regreso del bicampeón español: "Es importante dejar claro que Fernando no bastaría para compensar las deficiencias del coche del año pasado, pero tenemos confianza en que hemos resuelto los problemas y estamos como locos por darle el coche que su talento merece".
Symonds no oculta que la pasada temporada fue muy decepcionante y explica, a su manera, las causas de lo ocurrido: "Hemos tenido dos problemas y cada uno de ellos habría bastado para causarnos serias dificultades, pero la combinación de ambos ha sido particularmente dañina".
Aún falta más de un mes para que el circuito australiano de Melbourne suba el telón a la nueva temporada, pero las señales indican que los resultados a los que aspira la dupla Alonso-Renault pueden ser más pretenciosos que los inicialmente previstos. Salvo Ferrari, que parece varios escalones por encima, el resto de equipos pueden tener muchos problemas con los dominadores de los campeonatos de 2005 y 2006. Pronto empezarán a despejarse las dudas.
Vía as.com
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